¿Cómo limpiar el tubo de escape?
El tubo de escape de nuestro vehículo es uno de los elementos más susceptibles de ensuciarse debido a sus propias características y funciones. Por eso es necesario que prestemos especial atención a su limpieza, y para ello, vamos a ver algunos consejos prácticos en este post. ¡Vamos allá!
Primero es necesario preguntarse ¿qué es el tubo de escape? Es el conducto o sistema implantado en los motores de combustión interna para dirigir al exterior los gases producidos en la cámara, una vez se ha producido la compresión o combustión de la mezcla de carburante/aire. El uso del sistema de escape, en concreto del tubo de escape, es obligatorio, entre otras razones, para reducir el ruido producido por el proceso de combustión en la cámara, una vez que las válvulas se abren.
Como hemos comentado de forma breve, las dos funciones principales del tubo de escape son:
- Facilitar la salida de los gases
- Aminorar el ruido
Por su forma y disposición, está claro que su función es la de transportar los gases desde la cámara hasta el exterior. Sin embargo, en cuanto a la reducción del ruido, hay que tener en cuenta que, cuando los gases salen de la cámara de combustión, lo hacen en forma de ondas pulsantes, las cuales, una vez dentro de los conductos, se convierten en ondas sonoras. Este fenómeno se produce en la salida de cada cilindro, con lo que, a mayor número de cilindros, mayor será el ruido producido por las ondas. Por ello, el diseño del tubo de escape busca paliar este efecto sonoro a la vez que permite que los gases circulen. De ahí su importancia.
Habrás notado que hablamos de sistema de escape, diferenciándolo del tubo de escape. Esto se debe a que el tubo es sólo una parte del sistema de escape, ya que éste consta de:
- Colector de escape
- Catalizador
- Filtro de partículas (Motores Diésel)
- Sonda Lambda (Motores Gasolina)
- Silenciador
- Cola
La gran mayoría de estos elementos están expuestos a la carbonilla generada por los gases de la combustión. Pero, a demás, las averías que sufren suelen ser de las más caras en casos como la Valvula EGR, el Turbo, o el FAP.
Limpiar tubo de escape coche
Nuestra recomendación en este sentido es realizar una descarbonización del motor junto con el mantenimiento anual de tu vehículo, ya que es la manera más cómoda, segura y eficiente de limpiar la carbonilla, no sólo del tubo de escape, sino de todos los elementos del sistema de admisión y escape, incluyendo las cabezas de los inyectores, los colectores de admisión y escape, y los sistemas de re-circulación de gases y anti-contaminación.
Limpiar tubo de escape moto
En el caso de las motocicletas, también podemos limpiar nosotros mismos el tubo de escape, aunque con especial atención a algunos de sus elementos.
Primero, desmonta y retira el caño de escape, y si quieres, aprovecha para limpiarlo con un cepillo, de cerdas fuertes preferiblemente. A continuación, desatornilla y desmonta el mofle de la moto, prestando especial cuidado a la manera en que desensamblas las piezas, ya que, de hacerlo con las herramientas incorrectas o de forma brusca o forzada, podrías dañarlas. Ahora retira el empaque del exosto para poder limpiar la entrada.
Ahora que has retirado el tubo, tapa su parte inferior para agregarle una solución limpiadora dentro. Usa una mezcla de soda cáustica y agua caliente, pero no olvides protegerte con guantes y mascarilla y evitar al máximo el contacto con la mezcla. Deja que repose de 10 a 15 minutos para que haga efecto.
En este momento, vacía el tubo, preferiblemente directo en el desagüe, con cuidado de no tocar los residuos, y aplica agua a presión en el interior del tubo, habiendo retirado previamente el tapón de uno de los extremos, para eliminar los residuos que hayan quedado en el interior, y evitar que los sobrantes de la mezcla dañen el metal, o peor aún, que cuando la moto vuelva a funcionar, los gases se mezclen con estos residuos y puedas respirar esta mezcla que es muy perjudicial para la salud. Por último, sólo tienes que dejar que se seque y ensamblarlo de nuevo.
Existen otra clase de limpiadores como los detergentes, pero que no eliminan ni limpian a profundidad los de residuos que deja la combustión en el tubo de escape, por lo que es mejor usar sosa cáustica, aunque es un producto más agresivo.
¿Cuándo limpiar tubo de escape?
Lo más recomendable es realizar una limpieza, no sólo del tubo de escape, sino de todo el sistema de escape, como mínimo una vez al año, a la vez que realizamos el mantenimiento general del vehículo. Un buen momento para hacerlo es, por ejemplo, en la inspección pre-ITV, en la que normalmente buscamos poner a punto nuestro vehículo para llevarlo a la inspección periódica. Sin embargo, y sobre todo en los motores diésel, que producen mayor nivel de carbonilla, este procedimiento se puede realizar dos veces al año, es decir, cada 6 meses aproximadamente.
¿Con que limpiar tubo de escape?
Como ya hemos dicho anteriormente, en el caso de que quieras realizar el proceso de limpieza del tubo de escape lo mejor es recurrir a uno de nuestros talleres asociados especializados en descarbonización pero si quieres hacerlo por tu cuenta, hay algunos métodos caseros para limpiar el tubo de escape que puedes poner en práctica. Veamos algunos de ellos:
Limpieza con varilla
Insertar una varilla o baqueta, lo más larga posible, es una buena opción para alcanzar las paredes internas del tubo de escape. Sin embargo, al tener que hacerlo en repetidas ocasiones para poder extraer al máximo la suciedad, corremos el riesgo de arañar dichas paredes, perdiendo así la capa de galvanizado que tiene de fábrica, lo cual produciría una mayor oxidación o que se produzca más prematuramente.
Manguera
Insertar una manguera en el interior del tubo, y abrir el flujo de agua con una presión no muy elevada, es un método más rápido y cómodo, pero aumenta considerablemente las probabilidades de que el interior del tubo se oxide, si se quedan residuos de agua en su interior.
Soda cáustica
Usar este producto puede ser más eficaz que los dos anteriores, incluso que otros parecidos como detergentes, etc. Sin embargo, por sus características propias, es mucho más agresivo, no sólo con la carbonilla, sino también con el propio tubo de escape, con lo que puede ser peor la cura que la enfermedad.
Ahora que has visto las diferentes posibilidades para limpiar el tubo de escape de tu vehículo, sea moto o coche, te habrás dado cuenta de que es un proceso no demasiado complicado, pero sí con algunos riesgos. Primeramente, si no tienes las herramientas adecuadas, corres el riesgo de dañar las piezas que desmontes, juntas, tornillos, etc. Por otra parte, corres el riesgo de arañar y dañar el interior del tubo, si lo limpias con una varilla o baqueta sin mucho cuidado. A demás, aunque simplemente uses agua normal y corriente, si quedan residuos en el interior, corres el riesgo de que se oxide más fácilmente, por no hablar del riesgo de usar un producto químico como la soda cáustica que puede corroer el metal.
Pero la cosa no termina ahí. Añadido al riesgo de herirte con alguna pieza metálica al desmontarla, o incluso con las propias herramientas, está el riesgo de intoxicarte con los vapores producidos por la mezcla que introduzcas en el interior del tubo para limpiarlo, o incluso de herir tu piel o tus ojos si contacta directamente con alguna parte de ellos. Incluso si no te hicieras daño durante el proceso de limpieza con el líquido, pero dejaras algún resto en el interior, cuando se mezclen los gases de la combustión y los vapores de los residuos, puedes sufrir intoxicaciones más peligrosas a nivel respiratorio con los humos producidos.
Sin embargo, si decides beneficiarte de las ventajas de la descarbonización por hidrógeno que te ofrecen nuestros talleres asociados, evitarás los riesgos de dañar cualquiera de las piezas de tu motor, porque el proceso no usa ningún aditivo o químico, y se produce por una reacción natural en la cámara de combustión. De esta manera no correrá peligro ni tu salud, ni la salud de tu motor. Y por supuesto, tu bolsillo y tu vehículo lo agradecerán.
Contáctanos para que limpiemos su motor
Gracias a nuestro proceso de descarbonización de el motor de coche mediante la inyección de hidrógeno conseguimos mejorar el fenómeno natural del enriquecimiento de la mezcla de combustible y aire que se produce en el interior del motor del coche. La descarbonización por hidrógeno es un tratamiento de limpieza que no tiene introduce químicos en el motor, por lo que es una solución no agresiva y efectiva debido a que la carbonilla es disuelta en el motor y se evacua elimina de manera natural mediante el tubo de escape. Si necesitas encontrar uno de nuestros talleres asociados, puedes hacerlo aquí.